viernes, 3 de abril de 2009

Abel Tasman [Parte III]

Continuando con: Abel Tasman [Parte I] y Abel Tasman [Parte II]

Totaranui parecía un barrio privado de casas rodantes. Estaba separado en distintos claros, todos cercados por una ligustrina y en cada claro, había una monton de lugares para las casas rodantes, y cada casa rodante, parecía un hotel de lujo. Estos Kiwis no saben lo que es un campamento de verdad!
Nosotros en cambio, teníamos nuestra humilde carpa, y nos instalamos en un sector para la gente que venia caminando, lo mas abajo de un árbol que pudimos, porque se venia la lluvia. Después de estar instalados, nos fuimos a la cabañita de administración del camping, que estaba cerrada pero tenia un lindo deck techado, y nos alcanzo para aprender a jugar un par de juegos de cartas franceses. La falta de barajas españolas nos impidió educarlas en lo que respecta al Truco.

Antes de que oscurezca, nos robamos una mesa de por ahí, la metimos abajo del techo, y cenamos una rica ensalada de arveja, choclo y queso, y así nos deshicimos de las pesadas latas que veníamos acarreando en las mochilas.

Por suerte, las chicas engatusaron al guarda camping en un momento que apareció por ahí, le pidieron que abra el kiosco y compraron un par de chocolates con la excusa de que al otro día íbamos a caminar mucho, y íbamos a necesitar azúcar. Mentira, eran para el postre! Y claramente se puede ver que Delph fue la que mas disfruto del chocolate!



Despues de pasar una noche relativamente seca, arrancaba nuestro ultimo día en el Parque Nacional que por suerte nos toco muuuuy soleado. Íbamos a dar una vuelta caminando, bordeando por la costa hasta la punta del parque, Mutton Cove y después agarrando el camino que subía a la montaña mas alta de por ahí, para bajar derecho hasta Totaranui de nuevo, y que nos busque el Water Taxi.

Habían playas muy lindas, pero estábamos ajustados con los horarios, así que nos limitamos a caminar y caminar, sin echarnos como lagartos a disfrutar ninguna de las playas.



Almorzamos en una linda sombra que conseguimos abajo de un arbol, y nos comimos tooooooooodo lo que nos quedaba!


La caminata fue muy tranqui. Solo se puso jodida cuando tuvimos que subir hasta el punto mas alto de la montaña, porque era un camino muy empinado, no había ni un solo árbol de sombra, y el sol nos castigo la nuca durante todo el trayecto. La vista desde arriba estaba muy buena, pero nuevamente, era una vista patagónica!

Volvimos al camping una hora antes de que nos busque la lancha, tiempo justo para un chapuzón en el mar, una ducha, desarmar la carpa y armar las mochilas. Con la lancha pasamos por la "colonia" de focas, y vimos un par mas de foquitas y finalmente, nos llevo hasta Marahau donde teníamos la Van estacionada y nos volvimos para Motueka.

Terminada la aventura, nos dimos cuenta de que el recorrido que armamos, no era de lo mejor ni lo mas barato, y que siempre estábamos corriendo en contra del reloj, así que no habíamos podido disfrutar todo lo que nos hubiera gustado [sin tener en cuenta el mal clima.]



En mi humilde opinión, el recorrido que conviene hacer, siempre y cuando tengas auto es el siguiente. Sacar solo 1 día de Kayak, con una promoción que te ofrecen, que te llevan hasta Anchorage, o por ahí en la lancha, y vos tenes que volver remando hasta Marahau. Lo que tiene esto de bueno, es que te dan el kayak temprano a la mañana, y lo tenes que devolver a la tarde, así que lo tenes casi el mismo tiempo que si lo alquilas 2 días. Aparte, como no tienen que ir a buscar el kayak no te cobran por el retorno, y por ultimo, tenes viento a favor todo el tiempo, así que te cansas menos remando!
De ahí agarras el auto y te vas hasta Totaranui, que es el único camping donde se puede llegar en auto, te armas una carpa ahí, y salís a caminar un día para un lado, y al otro día para el otro lado, volviendo a la hora que se te canta, y quedándote todo lo que quieras en la playa que mas te guste. Y cuando consideras que ya viste suficiente del parque, te subís al auto y te vas. Otra de las ventajas que tiene esto, es que podes llevar la comida en el auto, y no la tenes que cargar en la mochila, lo mismo que si te queres llevar una garrafita para cocinar.

Aparte, en Totaranui no hace falta reservar el camping, y si llegas cuando esta cerrada la administración, tienen un buzón donde podes meter la plata por la carpa cosa de que no te echen cuando aparece el guardaparque.



Y colorin colorado, este cuento ha terminado.

2 comentarios:

  1. Nuestro cuarteto...
    Soy nostalgica de estos momentos tan buenos!

    Es gracioso de acordarse, cuando usted comio todo los restos ,el ultimo dia.
    Porque usted se acuerda? el pequeno roedor que habia comido todos mis alimentos!
    Afortunadamente: hay siempre zanahorias y no es malo para la sabiduria!!
    (consegui poner 2 palabras de mi vocabulario espanol: zanahoria+sabiduria ;) )

    Y la proxima vez, jugaremos al truco!!

    Besos a todo los dos!
    Nath.

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  2. Buenisima la saga de Abel Tasman!!!! Una genia Nath con su español y me impresionò el respeto y la distancia con que los trata. Se ve que han sido unos caballeros andantes!!!!! Besos.

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