Como en cualquier lado, acá esta prohibido tomar alcohol en la vía publica. La única diferencia es que acá te hacen respetarlo, y si te encuentran tomando, solo te piden gentilmente que tires la bebida al piso. En eso estábamos cuando apareció el primer móvil de la policía, pero por suerte ya habíamos vaciado todas nuestras latas antes de que lleguen, y solo nos pidieron que las tiráramos a la basura.
Pasado un rato, nos fuimos para el Irish Pub, donde era la fiesta latina. Buena onda, repleto de hispano hablantes, lindas chicas, casicasi como en casa!
Después de un inofensivo incidente en el baño de damas con una cebra y una cámara de fotos, Ramiro fue invitado a abandonar el lugar, pero como tenemos algunos contactos, le abrieron la puerta de emergencia para que volviera a entrar, Obviamente, cuando lo vieron adentro de nuevo, lo volvieron a invitar a retirarse, solo para que vuelva a entrar por atrás, así 3 veces.
Cuando el lugar cerro, y estábamos todos en nuestros planes para irnos, se armo una de esas discusiones que nadie sabe porque son ni como empezaron. La cuestión es que eramos un montón de Argentinos discutiendo con otro montón de Argentinos, no pasaba de voces altas, hasta que alguien tiro una piña que paso cerca, y se armo una batabola y una serie de corridas que no duro mas de 30 segundos porque intervino una rubia infernal, vestida de policía [que si era policía] con una aerosol de pimienta, y nos tiro a todos en la cara. La gente empezó a correr, pero Yo, el pobre boludo que estaba separando, me quede quietito porque no tenia ningún motivo para correr, pero eso fue razón suficiente para que la rubia se me acerque no para pedirme el teléfono, sino para esposarme, y subirme a la van con rejas! Pero no estaba solo! Maxi, uno de los argentinos que estaba separando para el otro bando también termino en las mismas que yo. Ahí fue cuando mande el mensaje al Twitter, para que aparezca acá en el Blog "Me están arrestando! Arde!". Nos llevaron a la comisaria y ahí nomas nos sacaron las esposas. Dentro de la comisaria, era todo muuuuuy relajado, parecía una juntada entre amigos. Yo me cruzaba para el lado del mostrador de la rubia, chiste por acá chiste por allá, nos dijeron que teníamos que pasar la noche adentro y después íbamos a tener que pagar una multa de entre 300 y 500 dolares. CHAN.
Nos llevaron a una celda y nos metieron a los dos, pero como no cerraba la puerta, nos cambiaron a dos celdas individuales, cada una con baño en swite y un colchón. Era algo cerca de las 4 de la mañana, y como no había nada que hacer me tire a dormir. Me desperté algo cerca de las 930 de la mañana, y no espere mas de 10 minutos hasta que entro un policía con el desayuno! Un cosito de leche, 2 porciones de avena y una barrita de cereal, vacito y cucharita. Desayuno de campeones! Me distraje con eso un rato, y tipo 1020 me sacaron de la celda, para terminar de llenar unos formularios. A todo esto, estábamos acusados de "Disorderly Behaviour" o "Conducta Desordenada", y teníamos una cita con el Juez el miércoles a las 9. Igual, firmamos una cosa, que decía que nos declarábamos culpables, así que si no queríamos ir a la corte, no hacia falta.
Como Maxi esta por irse a Australia, necesitaba saber la desicion del Juez, así que fuimos a la corte el miércoles tempranito, y ahí nos ofrecieron lo que ellos llaman "Diversion", que te lo dan solo una vez en la vida, y es cuando es un delito menor y es tu primera vez. La Diversion dice que si haces una donación de $100 a algún organismo de caridad, te levantan todos los cargos no te queda ningún tipo de causa judicial y sos libre de tomarte el palo. Obviamente, hicimos la donación y nos fuimos muy contentos. El tramite no duro mas de 30 minutos!
Así que de esta forma debute en mi carrera como convicto.
Versión resumida de El Nubis:
"O sea que una mina que estaba barbara practicamente te ataco, te llevo en su auto hasta su lugar y al otro dia te desperto con el desayuno en la camita."
jajajaj sos un genio
ResponderEliminarJorgito: faltó la foto de la rubia infartante!
ResponderEliminarUn abrazo
Luis Abeijón